Tal como sucede con nosotros, los humanos, los perros son propensos a sufrir diferentes enfermedades a lo largo de su vida. Las temperaturas extremas, una alimentación poco favorable o las condiciones de vida muy precarias hacen que el sistema inmunológico de este tipo de animal se vea afectado.
Sin embargo, hay algunas razas que están genéticamente predispuestas a sufrir diversos problemas congénitos. A continuación les contaremos un par de casos puntuales que grafican claramente lo que les estamos comentando.
Bulldog: Si bien ahora esta clase de can presenta un aspecto bastante gordo, en sus orígenes era un perro preparado para pelear y para realizar una actividad física extrema. Es una especie que tiene mucha fuerza, pero que también muestra una distribución desbalanceada de su peso, que reside mayoritariamente en la parte frontal de su cuerpo. Dicha característica hace que este tipo de perros sufran displasia de cadera y tengan problemas para caminar correctamente.
Shar Pei: Es un perro que llama la atención debido al particular formato de piel que presenta. El cuero de este animal se arruga sobre su cuerpo y le brinda un aspecto similar a un acordeón. Pero más allá de lo “divertido” que nos parece su aspecto, la gran cantidad de pliegues que se forman en su piel lo convierten en caldo de cultivo para hongos y bacterias. Por dicho motivo es muy común que estos perros presenten un fuerte olor cuando no se los higieniza constantemente.
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